Una experiencia fantástica y única. Conoces gente, lugares, paisajes. Te encuentras contigo mismo y valoras más todo lo que tienes a tu alrededor. Hacer el camino me ha encantado. Ya hice una parte el año pasado y he necesitado hacerlo entero para poder sentirme bien conmigo misma. Ahora tengo ganas de hacer diferentes caminos y así ir descubriendo la belleza que se esconde detrás de cada uno de ellos.