
El día más caluroso y tedioso | Camino del Norte de Santillana de Mar a Comillas - Día 14
Somos una pareja joven que se dedica a crear contenido de fotos y videos, así como nuestra propia música. Nuestro contenido está relacionado con viajes y aventuras. Somos caminantes apasionados que aman el senderismo, el trekking y el campamento. Nuestro objetivo es promover un estilo de vida saludable, motivar a las personas a caminar más y cuidar la naturaleza.
En el día 14 de nuestro Camino de Santiago del Norte, llegamos desde el pueblo de Santillana de Mar hasta el pueblo de Comillas en la costa del océano.
Descansamos bien y con nuevos poderes comenzamos el día. Salimos del campamento Santillana un poco tarde a las 11 de la mañana, pero sabíamos que llegaríamos a tiempo porque vimos que el sendero iba por las carreteras asfaltadas y eso siempre significa que será más fácil.
Desde el principio, la ruta iba subiendo y bajando y subiendo y bajando todo el tiempo. Y aunque caminamos principalmente en rutas de asfalto ese día al final, los músculos de las piernas se sintieron realmente adoloridos.
Así que fue un día bastante agotador y un poco aburrido. Pasamos por varias aldeas con pequeñas casas blancas con techo rojo, conocimos a varias iglesias hermosas en el camino, pero nos extrañamos mucho las vistas del océano. Todo lo que vimos fue la hilera de edificios similares y las carreteras, pero al menos estaban casi sin tráfico.
Así que cuando llegamos a Cobreces finalmente podemos ver el océano y la playa al menos por un poco antes de volver a la carretera y caminar bajo el calor del sol. El sol nos estaba matando todo el día, especialmente porque no había ninguna sombra en los campos.
Así que todos los sudorosos y bronceados entramos en Comillas, nuestro destino final del día. Como siempre, necesitábamos comprar algunos comestibles, pero no pudimos encontrar ningún supermercado abierto y recordamos que ese día era una fiesta religiosa y que todos cerraron muy temprano. Nos salvaron los lugareños que nos dirigieron a la pequeña tienda de comida que estaba abierta y tenía todo lo que necesitábamos.
Después de tomar un bocadillo rápido fuimos al campamento y pudimos ver un poco del pueblo de Comillas. Fue similar al de ayer, con mucha gente en las calles: turistas y peregrinos y toneladas de pequeños comerciales en cada esquina. Pero parecía una pequeña ciudad linda con casas antiguas hechas de roca.
El camping no era malo, de todos modos no teníamos muchas opciones ya que era la única en esta ciudad. Allí conocimos a un chico inglés que fue muy amable y nos dio pequeños pasteles diciendo que hacer el Camino debe ser difícil. Entonces mi esposo habló un poco con él sobre la vida e incluso nos ofreció usar su estufa de cocina más grande para poder preparar la comida de manera más cómoda. Así que en esa nota positiva terminamos este día agotador.
Mire el video completo aquí: https://youtu.be/k45EGHt7wak
No olvides hacer clic en los subtítulos en español en el video.
- Inicie sesión o regístrese para comentar