El Camino de Santiago por Francia, agosto de 2012
Nombre:
Mariona Argemí
Cómo:
A pie
Cuándo:
Agosto de 2012
Experiencia:
Es un camino muy bello, con mucho paisaje y naturaleza. Los pueblos franceses son muy bonitos, la única pega eran lo horarios que van a la hora Europea. A los que les guste el arte románico en este camino van encontrar abadías e iglesias para disfrutar de su arquitectura.
El camino me gustó mucho, aunque cabe decir que nada tiene que ver con el Francés. Desde mi punto de vista, es un peregrinar más solitario, más silencioso y no abunda ni mucho menos la gente de los caminos de España.
He de decir que para la quietud, la calma, el gusto por la comida y la contemplación del paisaje vale mucho la pena.
Dificultad:
En general lo encontré mucho más duro que el camino del Norte. Aunque no sube mucho de desnivel sí que se hay fuertes subidas, largas distancias donde no hay pueblecito (como estamos acostumbrados en el Francés). No se trata ni mucho menos de un camino llano, normalmente se camina por la montaña, senderos.
Uno de los tramos más difíciles para mi fue de Saint Jean Pied de Port a Roncesvalles, pero no se me hizo tan duro porque lo hice de madrugada y así no vi la subida.
Señalización:
La señalización es buena, casi no hay pérdida, sólo en dos ocasiones me perdí.
Albergues:
He encontrado albergues como cámpings. Acostumbrada a los precios de España me han parecido más caros, es por eso que llevé conmigo la tienda de campaña para la ocasión de un cámping. La mayoría de veces dormí en los albergues (Gîte d'Etape que cuesta unos 15-18 euros con el desayuno incluido).
Magnífico un albergue que se llama L'Alchimist y que se encuentra en el pueblo de Navarrenx.
También vale la pena dormir en las abadías y en Lecture en el albergue parroquial, es más familiar y se come todos juntos.
Sugerencias a los futuros peregrinos:
Que si buscan un tiempo de paz, tranquilidad, y les gusta caminar y el paisaje este es un camino que les está esperando. Pero si busca encontrar a gente y hacer mucha juerga mejor que no lo tome porque se va aburrir mucho.
A los amantes de la soledad no tendrán ningún problema. Invito también a los que toman breaks durante el año, es una oportunidad para descansar (no tanto física) pero sí mentalmente.
Recomiendo escaparse a Rocamadour, pueblo muy cerca de Figeac, se tienen que desplazar en tren. Y también dormir en alguna ranchera, probar la comida d'Aubrac y el foie. Y cruzar durante tres días un valle que empieza saliendo de Figeac. Si preguntais la gente ya lo sabe. AH! Y no olvidar el bañador para sumergirse en los ríos.
En Cabrerets y Marcilhac sur Célé (estuvimos a punto de hacerlo pero se tiene que reservar) alquilan canoas y podéis bajar el río hasta llegar a Cahors, son unas cinco horas. Si queréis un día de descanso es todo un lujo.