Etapa fácil, agradable y sin apenas desniveles; los más rodados quizá puedan alargar la jornada hasta Baamonde, si bien ello implicaría caminar 39,4 km (ó 33,6 km para los que hayan dormido en As Paredes).
Etapa 33: Abadín - Vilalba | Al Loro
El itinerario avanza en paralelo al trazado de la carretera nacional N-634, la cual cruzaremos en dos ocasiones, y transcurre en su mayor parte por cómodas pistas de tierra o asfalto. | |
Nos encontramos en la comarca lucense de A Terra Chá, expresión gallega que significa tierra llana –aunque, en nuestra opinión como caminantes, resultaría más bien ondulada–, cuya principal actividad es la ganadera. | |
Los escasos servicios intermedios los encontraremos a pie de la carretera nacional, en los cruces de Martiñán y de O Campo do Cristo. | |
Tras dejar Martiñán el camino atraviesa el bonito puente de A Ponte Vella, de origen medieval pero reconstruido en el siglo XVII, por donde pasaba el Camino Real de Mondoñedo a Vilalba. | |
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El albergue de peregrinos de la Xunta se halla a pie de camino, pero alejado de la localidad: está 1,2 km antes de la entrada al casco urbano y a 2,0 km del centro. | |
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En pleno centro histórico de la villa destaca la Torre de los Andrade, único vestigio que resta del antiguo castillo medieval, hoy reconvertida en Parador de Turismo. | |
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El producto local más conocido es el queso San Simón da Costa, de sabor ahumado y profundo; se confecciona con leche de vaca y dispone de Denominación de Origen propia. | |
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La gastronomía de la zona incluye el capón, que es un gallo de corral, y el roscón de Vilalba, elaborado con almendras, huevo, azúcar y raspadura de limón. |
