A partir de ahora, el Ebro siempre quedará a nuestra derecha. De Pina salimos caminando por una carretera y, media hora después, nos desviamos a la derecha por un camino de tierra que avanza en paralelo a la vía del tren. Justo en el lugar donde dejamos la carretera para tomar el camino de tierra nuestro Camino Catalán por Zaragoza y el Camino del Ebro se unen. Andando siempre junto a la vía llegamos a Fuentes de Ebro, ciudad con todos los servicios.