En el margen izquierdo de la place de la République se toma el Chemin de Larrouze, que a los 100 m desemboca en el Chemin de Saint-Jacques. Un cartel humorístico, referido a los pies de los peregrinos, antecede la Maison Pantalou (chambre d’hôtes), ante la que se desciende al embalse de Arzacq.
Bordeamos el hermoso lago pasando sobre su dique de tierra, y tras completar la mitad de su perímetro lo dejamos por un camino pedregoso que asciende a través del bosque. Donde concluye el arbolado descendemos hacia el valle de Luy de France, y tras el decorado árbol del peregrino, un viejo roble, dejamos a la izquierda la Gîte Labalette.
2,7 Labalette. Con los Pirineos como permanente telón de fondo, el largo descenso concluye al cruzar el río Luy de France. El modesto núcleo de Louvigny nos recibe con su rehabilitado molino. Más adelante cruzamos la D270 para llegar a la Mairie (refugio, fuente, wc) y hasta la moderna y blanca iglesia (área de picnic).
2,0 Louvigny.