Desde la icónica Piazza della Signoria (resulta difícil encontrar un lugar tan bello para iniciar un camino) seguimos la Via dei Calzaiuoli, entre la iglesia de San Carlo dei Lombardi y el oratorio de San Michele, hasta la Piazza del Duomo, donde también se alzan el campanile de Giotto y el baptisterio exento.
Tras visitar la catedral de Santa Maria del Fiore, reanudamos la marcha por la Via Borgo San Lorenzo hasta la plaza en la que se eleva la basílica homónima con el monumento al condotiero Giovanni delle Bande Nere, un Medici.
Proseguimos en línea recta, ante el palacio Medici-Riccardi (1444), por las vías de’Ginori y San Gallo, en las que funcionaron hasta 18 hospitales de los que perdura algún emblema. Disponemos de cafés, pastelerías y tiendas para abastecernos.
La larga calle, en la que tienen asiento varios palacios, el oratorio de Gesù Pellegrino (fue hospital para sacerdotes peregrinos de San Jacopo) y el templo de los Caballeros de Malta, concluye en la puerta de San Gallo (s. XIII), que formaba parte de la tercera muralla. Accedemos así a la Piazza della Libertà, que también cuenta con un arco triunfal de los Lorena (1738).
Atención a las primeras señales, y a no seguir la Via del Ponte Rosso, sino ante las arcadas donde se acomodan las terrazas de los cafés Libertà y Galanti para tomar la Via Paolo Toscanelli. Poco después se cruza el torrente Mugnone por una pasarela.
Pasada la Gelateria Fiorentina (credencial y sello), vemos a la derecha el portón de acceso a los jardines dell’Orticoltura (fuente), una auténtica bendición que nos evade un instante del bullicio urbano.
2,3 Giardini dell’Orticoltura. Dejamos la parte inferior del parque, ahora con señales bien visibles, y tras cruzar la vía férrea entramos en los Orti del Parnaso (fuente), desde donde divisamos las cúpulas de San Lorenzo y el duomo. Por la escalera del dragón salimos del jardín, continuando la marcha por barrios periféricos.
Vamos a mano izquierda por Via Trento, luego bajando en el mismo sentido por Via Trieste hasta Via Vittorio Emanuele, que seguimos a la derecha ante el parque de Villa Fabriccotti. Por aquí abundan las villas, construidas tras la Segunda Guerra Mundial en un estilo historicista.
Siempre al frente pasamos junto a la pastelería Bellucci hasta encontrar, a la derecha, la calle que sube hasta el convento dei Capuccini, con un pequeño vía crucis en el muro.
Giramos por la Via Michele Mercati, luego por Via Casamorata, contemplando al frente el monte Morello. Tras pasar ante Villa Le Macine, descendemos a la izquierda por Via Ernesto Rossi entre muros que limitan olivares.
Ante el portón de Villa Monteverdi alcanzamos la extensa área hospitalaria de Careggi, rodeando en primer lugar por la derecha el Centro Traumatológico y Ortopédico Padiglione.
2,8 Careggi, rotonda de acceso a los hospitales y un centro comercial (supermercado).