A la salida del pueblo, justo después del bar-albergue Castiellu, superamos una parada de autobús junto a una verja y acto seguido un muro de piedra con almenas, donde giramos a la derecha por una calle en fuerte subida; aquí, además de algunas flechas pintadas, veremos indicaciones de la Senda Costera GR E-9 hacia Llanes [Nota: aquellos que decidan continuar de frente desembocarán en la carretera nacional, si bien no resulta la ruta más aconsejable]. Tras la cuesta, y siguiendo siempre las marcas rojas y blancas del GR, caminaremos durante 1,3 km por una pista que lleva a la playa de Vidiago, donde cruzamos un pequeño puente sobre la desembocadura del arroyo Novales.
1,7 Playa de Vidiago. Mucha atención aquí, pues al cabo de 40 metros se presentan dos opciones: a la derecha, por una rampa en subida, prosigue la Senda Costera, alejada del tráfico y con bellísimos paisajes, mientras que de frente desembocaríamos de nuevo en la carretera N-634, por la cual discurre —inexplicablemente— el trazado oficial (todo apunta a una razón histórica, dado que bajo su asfalto descansan los restos del antiguo Camino Real a Llanes).
[Trazado oficial (no aconsejable): los que decidan continuar de frente llegarán a un trébol o rotonda de la autovía, donde toca incorporarse al arcén de la N-634, si bien después las flechas invitan a dar pequeños rodeos —a veces mal señalizados— al objeto de evitar los tramos más peligrosos. El recorrido, siempre lejos de la costa, pasa por las localidades de Vidiago, Riego, Puertas de Vidiago, Purón y San Roque del Acebal; después de cruzar bajo la autovía se accede a la ermita del Cristo del Camino, ya cerca de Llanes. Esta ruta oficial supone unos 12,4 km hasta Llanes, distancia casi idéntica a la Senda Costera].
Nosotros optamos por seguir la Senda Costera, bien señalizada gracias a las marcas rojas y blancas del GR E-9: así pues tomamos la rampa a la derecha, estrecha y con pasamanos de madera, que más adelante se convierte en un camino más ancho; al cabo de 1,4 km llegamos ante un pequeño cementerio donde giramos a la derecha por una pista que se acerca a la costa y que, tras varias bifurcaciones señalizadas, nos conducirá hasta los bufones de Arenillas, lugar declarado Monumento Natural (ver Al Loro).
3,4 Bufones de Arenillas. Continuamos de frente y al cabo de 800 metros tomamos un desvío a mano derecha que nos lleva, en bajada, a un puente de madera sobre el río Purón; lo atravesamos e iniciamos el ascenso; 450 metros después, en una nueva bifurcación, seguimos el camino de la derecha que conduce, tras 1,3 km, al pueblo de Andrín.
3,4 Andrín, localidad pequeña pero que dispone de servicios, con algún restaurante de precios altos y exigua amabilidad.