Etapa 73: Medesano - Sivizzano | Recorrido
0,0 | |
5,5 km | Desde la plataforma sobre la que se alza la iglesia parroquial bajamos a la ruidosa carretera SP357, provista de aceras. Pasamos ante el curioso monumento naval en recuerdo del acorazado Vittorio Veneto, uno de los tres que dispuso Italia durante la II Guerra Mundial. Donde concluye la acera comienza una pista peatonal y de bicis que pasa ante la granja de La Medesanese, con venta directa de queso Parmigiano Reggiano y otros productos, y alcanza la zona residencial de La Carnevala. Aquí se alza un pequeño centro comercial que posee una torre rematada en pirámide. 1,7 La Carnevala. Dejamos la carretera para ascender con ganas a la derecha entre las granjas de La Gatta y Turba. Por el cordal de la colina, entre campos de cereal nos dirigimos hacia un solitario y monumental roble, la Quercia del Pellegrino, con un buzón para que dejemos nuestros pensamientos. Poco después, en el cruce de la Ca’ Pianezza existe un oratorio con zona de descanso donde figuran unos versos del poeta parmesano Pier Luigi Bacchini. Abarcamos una amplia visión sobre la llanura de Parma y, en la bajada, del pueblo de Felegara, el valle del Taro y las colinas y montañas que nos esperan. Accedemos a la localidad, de gran tamaño y con servicios a pie de ruta, por la Via Repubblica (carretera), que dejamos para desviarnos a la izquierda, bajo la vía del tren por Via Picelli, hasta la iglesia de San Giovanni Battista. 3,8 Felegara. |
5,5 | |
6,0 km | Junto al camino hay un pequeño parque con una mesa cubierta y fuente. Luego pasamos bajo la A15 (Autostrada della Cisa) y de repente nos adentramos en el inesperado parque natural del río Taro, toda una satisfacción. Entre el disperso arbolado de ribera y sus viñas silvestres —con posibilidad de acercarnos a la orilla, repleta de arrastres arenosos y cantos— pisamos senderos que nos conducen bajo el puente del ferrocarril. A continuación bordeamos la gran fábrica de cal Grigolin y una gravera (una de cal, y otra de arena…, por fuerte contraste con el espacio natural). Tras las fábricas se interpone también el campo de fútbol de Ramiola, que rodeamos para subir hasta el largo puente que cruza el río Taro, que en el extremo más próximo a Fornovo cuenta con una escultura de nuestro compañero Sigerico. Una escalera desciende desde el puente a una explanada (supermercado) junto al río y con su paseo arbolado. Desde ella nos dirigimos, por el casco antiguo y a través de las plazas Italo Pizzi y Giacomo Matteotti, hasta la del IV de Novembre, presidida por la iglesia de Santa María. |
11,5 | |
3,2 km | Después de cruzar la Via Nazionale (SS62), la Francígena se empina por la Via Giuglielmo Marconi, trazando unas revueltas entre casas colgadas de la ladera del monte della Croce y algunas villas con jardines. El tramo final hasta Caselle, con su oratorio y fuente, carece de sombra y se torna bastante duro. 2,1 Caselle. Mirando hacia atrás desde lo alto vemos todo lo que hemos completado a partir de Medesano, con el valle del Taro, los puentes y el solitario roble. Un pronunciado descenso provoca un cambio de escenario, ya que ahora nos situamos frente a un bucólico valle, con cultivos, praderas y bosques, contorneado de montañas. Es así como, en Respiccio, confluimos con la SP39. 1,1 Respiccio. |
14,7 | |
4,2 km | Toca seguir la carretera de Val Sporzana, sin arcén aunque tampoco con demasiado tráfico, introduciéndonos en un valle cada vez más angosto. Tras pasar ante la Casa delle Viole llegamos al pequeño núcleo de Roncolongo con su capilla de aire meridional. No hay más que seguir la misma vía hasta Case Rosa y Sivizzano. |
18,9 |