Etapa 8A: A Ramallosa - Vigo (camino oficial) | Al Loro

Justo tras cruzar el puente románico de A Ramallosa deberemos decidir entre seguir de frente por el trazado oficial, que va por el interior (con flechas amarillas), o girar a la izquierda para tomar la variante alternativa por el litoral (con flechas verdes, y más adelante también amarillas). Disponemos de un panel informativo en varios idiomas, con mapa, en la misma bifurcación.

El camino oficial discurre por zonas bastante urbanizadas, casi siempre por aceras o asfalto y sin excesivos alicientes, en un recorrido un tanto rompepiernas por sus continuos desniveles.

Antes de entrar en Coruxo tenemos el desvío hacia la variante de O Freixo, que seguirán aquellos que decidan pernoctar en el pequeño albergue-refugio do Freixo, que regenta la asociación de vecinos de dicho barrio. Se recomienda avisar de nuestra llegada llamando a los teléfonos indicados en el cartel. Inolvidable la tortilla que cocina Suso en el bar de la asociación.

Por la ruta oficial entraremos en Vigo por la puerta de atrás, bordeando una zona industrial junto a la fábrica Citroën y el estadio de Balaídos; pero acto seguido recorreremos el parque de Castrelos y la senda fluvial del río Lagares, un pequeño oasis verde a pocos kilómetros del centro.

A pesar de no ser capital de provincia, Vigo es la mayor ciudad de toda Galicia, por lo que deberemos armarnos de paciencia para atravesarla. Aun con su mala fama de ciudad industrial, resulta mucho más interesante y animada de lo que pueda parecer.

El concello ha prohibido —caso único en el país— la señalización del Camino de Santiago, por parte de Turismo de Galicia, en el casco urbano. El absurdo veto ha sido en parte paliado por los hosteleros, que han colocado en sus escaparates un buen número de pegatinas con la flecha amarilla para guiarnos.

Desde Vigo pueden tomarse barcos hasta las islas Cíes y Ons, que forman parte del Parque Nacional das Illas Atlánticas, y como tales bajo estricta protección por la fauna terrestre y marítima que albergan, con maravillosas playas de arena blanca. Más información: Parque Nacional marítimo-terrestre das Illas Atlánticas de Galicia.

Un buen lugar para ver la puesta de sol sobre la ría y las islas Cíes es la terraza del moderno centro comercial A Laxe, situado en el puerto y al cual se puede acceder por una pasarela peatonal desde el casco viejo.

El Museo do Mar de Galicia, ante el que pasa el Camino, ocupa la que fue conservera Alcabre-Molino de Viento, de fines del s. XIX, y más tarde matadero, brillantemente reacondicionada por los arquitectos Aldo Rossi y César Portela. Acoge exposiciones temáticas, e incluye un acuario y un pequeño faro. Más información: Museo do Mar de Galicia.

La ciudad ha sido escenario de varias películas: seguro que muchos recordarán Los lunes al sol, film de 2002 de Fernando León de Aranoa, en especial las escenas donde Javier Bardem y Luis Tosar, víctimas de la reconversión de los astilleros vigueses, cruzaban la ría en el transbordador con las grúas y el skyline industrial como telón de fondo.

En el puerto deportivo hay una escultura dedicada al escritor Jules Verne (1828-1905), quien ambientó en la ría de Vigo un capítulo de su novela 20.000 leguas de viaje submarino, donde el misterioso Capitán Nemo buscaba con su Nautilus los tesoros sumergidos de unos galeones españoles, hundidos en 1702, en el estrecho de Rande, al ser atacados por la flota anglo-holandesa durante la guerra de Sucesión.