Etapa 11: Sernadelo - Águeda | Recorrido
0,0 | |
1,9 km | Nota: La de hoy es una de esas jornadas que discurre por una sucesión ininterrumpida de pueblos, calles, carreteritas y polígonos industriales. Entrar en el detalle de describir cada giro o cambio de dirección resultaría farragoso –y por otra parte innecesario, pues el recorrido está suficientemente marcado–. Además, a estas alturas de camino seguro que ya somos expertos en seguir flechas; por ello vamos a intentar resumir sólo aquella información que creemos pueda ser más útil durante el recorrido. Arrancamos desde la calle de detrás del albergue Hilário, la Rua da Fonte, y enseguida tomamos a la derecha la Rua 25 de Abril, que al cabo de 450 metros dejaremos por la izquierda. Salimos de Sernadelo por una pista de tierra que se interna en un bosque de pinos y eucaliptos, que será probablemente el tramo más agradable de la jornada. El camino está marcado con mojones y postes de madera. Tras pasar una zona con olivos llegamos a las casas de la pequeña localidad de Alpalhão. |
1,9 | |
5,8 km | Pasamos junto a una capilla blanca, donde giramos a la derecha. Bajamos por la Estrada dos Poços para pasar por las afueras del pueblo de Aguim. Justro tras pasar frente a una iglesia moderna deberemos torcer a la derecha por la Estrada del Vale de Cid y acto seguido, en una rotonda, seguiremos a la izquierda. Pasamos junto a unas naves blancas, y después de una bajada a la izquierda llegamos a la gran zona deportiva de Anadia; pasamos frente al curioso edificio del cine-teatro, continuamos recto por una avenida con bloques de viviendas hasta una gasolinera. Justo antes de la siguiente rotonda cambiamos de acera y nos desviamos hacia la derecha, pasando junto al cementerio. Seguimos por aceras de adoquines hasta llegar a Arcos. |
7,7 | |
4,3 km | Pasamos ante su iglesia parroquial y 150 metros después giramos a la izquierda por la Rua Calçada. Llegamos al núcleo de Alféloas, donde hay un bar. Pasamos una pequeña rotonda con un cruceiro en su centro, y más adelante otra con un poste eléctrico. Al final de una calle sin salida cruzamos una carretera y seguimos a la izquierda en subida hasta desembocar en una zona industrial. Continuamos por el arcén de una carretera con escaso tránsito, para pasar al cabo de 1,5 km junto a un cementerio. Cuando ya casi enlazamos con la carretera nacional EN-1, giramos a la derecha por un paseo arbolado con un cruceiro y entramos en Avelãs de Caminho. |
12,0 | |
2,0 km | Tras recorrer el centro de la población, las flechas nos llevan a cruzar la carretera nacional EN-1 (ojo, porque de momento no hay semáforo ni paso de peatones) y seguir por una calle con acera de adoquines hacia la pequeña localidad de São João de Azenha. En la plaza hay una capilla a la sombra de un gran roble, un lugar adecuado para parar a descansar unos minutos. |
14,0 | |
2,1 km | Por una carretera secundaria sin apenas arcén llegamos a Aguada de Baixo. |
16,1 | |
7,4 km | Cruzamos la población pasando primero junto a una minicapilla, después ante un cruceiro bajo un templete en medio de la calle, y finalmente frente a una iglesia con la fachada alicatada. Salimos por una carreterita que indica en dirección hacia Landiosa. En breve pisaremos la antigua Estrada Real o Estrada Velha, ya en la freguesia de Barrô. Seguimos por asfalto, pasamos bajo la autovía IC2 y llegamos frente a la entrada al restaurante-bar Dois Postes, con árboles y un amplio aparcamiento; el motivo del nombre es que se halla justo bajo dos torretas eléctricas de alta tensión. Es uno de los restaurantes del gran polígono industrial que comienza justo a continuación. 2,4 Polígono industrial de Barrô. Tras pasar el restaurante giramos a la izquierda, junto a una rotonda, y seguimos por el arcén de la calle en dirección hacia el norte. La travesía de los 2 km del polígono se las trae, especialmente en las horas punta de los días laborables. Tras superar otra rotonda y caminar una larga recta de una carretera entre naves, la dejamos por la izquierda, tomando de nuevo la Estrada Real, ahora en la freguesia de Recardães. Siempre por asfalto y aceras pasamos junto a unos bloques de viviendas, y ya en bajada llegamos a la Fonte do Atalho, que data de 1467. Desde aquí ya tenemos a la vista, muy cerca, la ciudad de Águeda. Cruzamos con cuidado la carretera N-1, pues no hay paso para peatones; atravesamos las casas del barrio de Sardão y llegamos a una zona de parque junto al río. Cruzamos un puentecito peatonal de madera, pasamos después bajo la carretera N-230 y finalmente enfilamos el puente sobre el río, que nos deja en la bonita plaza de entrada a Águeda. 5,0 Águeda, Praça da República. Los restaurantes y hostels están en las inmediaciones de esta plaza, en la zona central de la villa. Si nuestra intención es pernoctar en el albergue privado Santo António –Residencial Celeste– nos falta todavía 1,2 km en subida, a lo largo de la calle principal, que coincide con el tramo urbano de la carretera nacional N-1. A medio camino hay un supermercado Lidl. |
23,5 |