A partir de la catedral se puede seguir por la plaza Chiostri del Duomo (los claustros han desaparecido, ahora es un vulgar aparcamiento), para por la Via Prevostura recuperar el eje por el que la Francígena atraviesa el casco antiguo. Lo hace ahora por la Via Scalabrini, que desemboca en la gran encrucijada de la Piazza Roma, en la que se alza una columna rematada por la loba capitalina y sus retoños humanos.
La Via Cristoforo Colombo, en la que se suceden tiendas de alimentación, panaderías, cafés y supermercados, pronto se convierte en la carretera nacional 9, que constituirá un ingrato recuerdo. Pasadas dos rotondas, a la altura de un supermercado Conad nos desviamos a la izquierda por el barrio de San Lazzaro-Alberoni (fuente). Una vía ciclo/peatonal se aproxima al recinto de la Universidad Católica del Sacro Cuore, y luego atravesamos el parking que presta servicio a los dos tristes cementerios, viejo y nuevo, de San Lazzaro.
Principia aquí un tramo desangelado entre las vías del tren y un parque empresarial. Después de pasar bajo la circunvalación de Piacenza nos adentramos, entre dos parques (fuente), en el barrio de Montale.