Etapa 85: San Gimignano - Monteriggioni | Recorrido

Partimos de la Piazza del Duomo, cruzando a continuación la de la Cisterna, para enfilar la Via San Giovanni y salir del recinto murado por la puerta del mismo título hasta el Piazzale Martiri di Montemaggio. En este sector hay varios cafés y pastelerías para desayunar.

Bajamos hasta una rotonda, decorada con una moderna escultura, para tomar la SP47 e inmediatamente, a mano izquierda, la Strada di Santa Lucia, que conduce al camping y está provista de aceras. A 900 m del inicio, deparando fantásticas vistas sobre San Gimignano, pasa ante el convento de Monteoliveto, un remanso de paz que aconsejamos visitar (nos sellan la credencial).

1,6 Monteoliveto. Después de pasar ante el camping, proseguimos entre viñas y olivos hasta encontrar, junto a un oratorio y antes de llegar a Santa Lucia, un desvío sobre una pista de tierra. Por ella bajamos, con tramos boscosos, hasta el Bótro degli Imbotroni, agreste y bella vaguada cuyo arroyo cruzamos por un vado con piedras.

Ascendemos por la propiedad de la Tenuta Vallebuia con sus viñedos (por ellos se puede atajar) y luego transitamos junto al Podere Montarone y la Azienda Torracia di Chiusi. Por un nuevo sector boscoso, encajado en el terreno, la VF desciende hasta el lugar de Aiano (bar-restaurante).

Poco después, tras cruzar un segundo vado y pasar al lado de una fea granja abandonada, entre cartelas con pensamientos atadas a los robles nos topamos con la encrucijada de las dos variantes; unos paneles nos intentan ayudar en la elección.

5,4 Bifurcación. Por el añoso bosque que puebla la vaguada del torrente Foci, continuamos al frente. El contrapunto lo ponen una planta de gas y una depuradora.

De repente concluye el bosque, y la ruta se prolonga por una planicie fluvial ocupada por huertas de autoconsumo y tierras de cultivo. Junto a la vía se alzan las ruinas de la pieve de San Ippolito e Cassiano (s. XII-XIII).

En el momento de cruzar la SS68, que pisamos un instante, un indicador advierte que solo estamos a 500 m del centro de Campliglia dei Foci, pueblo con bar (lunes cerrado) y pizzeria (solo noches) invisible desde nuestra posición.

El itinerario deja el asfalto para proseguir por el valle sobre una pista agraria (fuente) que entre arbolado desemboca en una carretera.

3,4 Desvío a la abadía de Conèo (180 m, en subida). Regresamos al bosque denso por un camino pedregoso que se prolonga aproximadamente 1 km hasta la zona de pícnic de Piro. Justo después, ya caminamos entre las casas de Villa San Donato, con su palacete rural, capilla y fuente, y entramos en Quartaia, con la iglesia de los santos Jacopo e Filippo.

3,3 Quartaia.

---- Variante por Colle di Val d’Elsa (11,8 km) ----

Desde el cruce posterior a Aiano, se toma el desvío señalizado a la izquierda dejando el bosque para transitar por campos de cultivo y varias granjas como las de Prodeggia y Camaggiori.

Aumentan las casas, y entre dos cementerios desembocamos en la SP36, que tomamos a la derecha para, 100 m después, seguir a la izquierda la SS68 por Le Grazie. Prolongamos nuestros pasos por dicha carretera hasta que llegamos a Colle di Val d’Elsa, traspasando la Porta Nova para recorrer su monumental Borgo Alto.

Al final del recinto amurallado descendemos a la zona nueva, con la Piazza Arnolfo di Cambio como referencia. El trayecto urbano es complicado, pero tras las piscinas municipales Olimpia desembocamos en el bello sendero fluvial del Elsa.

Por el bosque de galería, y con zonas indicadas para el baño, se cruza el río sobre las piedras de una represa (no todo el año es posible) para seguir por la orilla opuesta en un largo y delicioso trayecto hasta Gracciano dell’Elsa. Ya por la población, desde la iglesia de San Marziale seguimos en todo momento la Via Fratelli Bandiera hasta converger en un parque con la traza principal.

Una carreterilla nos conduce hasta el lugar de Fabbrica, con su hacienda y una capilla medieval que en su fachada combina franjas de piedra de dos colores.

A continuación tomamos un camino pedregoso que pronto se aproxima al arroyo degli Strulli y su bosque de ribera, tramo realmente bello en el que se suceden algunas pozas para el baño. De este modo avanzamos hasta que el cauce tributa en el río Elsa, que cruzamos en el caserío de Le Nove. Llegamos así a Gracciano dell’Elsa.

Toca rodear los edificios del apéndice sur de Gracciano dell’Elsa por la Via Volturno (el centro dista 1 km), para bajar unas escaleras, en un parque. Una carretera privada rectilínea conduce al antiguo núcleo de Pieve a Elsa, donde giramos 90º al este. Cruzamos la SP541.

Pasamos junto a la piscina termal al aire libre de Le Caldane. Por un bosquete bordeamos el hotel Il Pietreto y, ya por un terreno más abierto, el Borgo Sant’Luigi, otro hotel. La aldea de Acquaviva (capilla) precede al vecino núcleo, algo mayor, de Strove.

A través de la Piazza Martiri di Montemaggio, en recuerdo de 19 partisanos fusilados en 1944, llegamos a la iglesia de San Martino con su jardín (zona de pícnic y fuente). Las casas, de piedra caliza y ladrillo, conforman un armónico conjunto.

Todavía saliendo de Strove, dejamos la SP74 para bordear la aldea de Castel Petraia, con su capilla formando parte de un antiguo edificio convertido en hotel; otro más, es la Toscana. Tras discurrir entre dos casas comienza un camino que desciende por un sugerente bosque para cruzar el Fosso di Castagneto.

Giramos hacia el norte para, entre olivares, llegar a Abbadia a Isola junto a la capilla hexagonal de la Madonna della Nevi. Monteriggioni, al modo de una visión romántica, se recorta al fondo con sus torres. Por su parte, la VF entra por un arco en el recinto murado del monasterio, que aún conserva su foso.

Dejamos el antiguo burgo por otro arco de la muralla para continuar un instante por una senda paralela a la SP74. A mano derecha se toma una vía agraria, rectilínea y con un solitario roble en el medio, que entre campos de cultivo se aproxima a Monteriggioni. Bordeando el bosque que tapiza el cerro llegamos a La Colonna.

Una senda peatonal, muy empinada (¡un último esfuerzo!), asciende a la plaza fuerte, a la que accedemos por la puerta de San Giovanni. En la plaza central se encuentran la iglesia de Santa Maria Assunta y el albergue.