Antes de llegar a As Ferreiras, donde se localiza el hostal Bayona, dejamos la nacional N-525 a la altura de un almacén de castañas, patatas y miel. Lo hacemos por un camino de tierra que cruza un robledal, pero que pronto desemboca en una carreterilla que desciende entre frondoso arbolado hasta el lugar de A Veiguiña. Antes de aproximarnos a la aldea, que queda a mano derecha, cruzamos el regato homónimo con su molino.
Junto al horno comunal seguimos al frente la pista, rodeados por masas boscosas autóctonas, que continúa cuesta arriba hasta Domiz. Algo mayor que Veiguiña, y alargada de norte a sur, en ella tampoco está ausente, al lado del camino, el horno comunal.