Sobre el accidente de O Pino

Dos peregrinos alemanes, de 43 o 49 años, murieron este viernes atropellados por un camión en la nacional N-547, unos 200 metros antes del albergue de la Xunta de Santa Irene. En la foto, marcado en naranja, vemos el lugar donde se produjo el atropello (en base a las informaciones de los periódicos locales). El camino de Santiago es la pista de tierra a la izquierda de la imagen, en paralelo a la carretera. Según las informaciones preliminares, los peregrinos o bien caminaban en dirección al albergue de la Xunta (hacia abajo), o bien se detuvieron para mirar el panel informativo que vemos en la imagen (colocado hace muchos años cuando el camino iba por la misma carretera). Sea como fuere, parece ser que los peregrinos se encontraban en el arcén y no en la calzada, por tanto estaban correctamente situados, pues en las carreteras nacionales españolas está permitido caminar por el arcén, y también parece ser que daban la espalda al carril de bajada (el de la izquierda en la imagen). En la imagen vemos unos peregrinos, que regresan de la aldea de Santa Irene (fuera del camino), cruzando la nacional; deberán caminar por el arcén unos 20 metros dando la espalda a los vehículos que bajan. En esta misma nacional, y no demasiado lejos, murió atropellada otra peregrina el año pasado. En el conjunto de los Caminos de Santiago en España, cada año se producen varios atropellos mortales, tanto de peregrinos a pie como en bicicleta; no podemos olvidar que son un cuarto de millón los peregrinos que cada año camina o pedalea durante días, cruzando zonas pobladas y por tanto con carreteras y tráfico. El Camino de Santiago es seguro, el riesgo es bajo, y más aún el Camino Francés, pero como cualquier actividad al aire libre tiene unos riesgos inherentes. Desde hace muchos años tanto las administraciones como las asociaciones han ido encontrando soluciones para aumentar la seguridad de los peregrinos en los tramos peligrosos, abriendo nuevos caminos, cambiando itinerarios, construyendo pasarelas o túneles, etc… sin ningún tipo de duda el camino es hoy en día muchísimo más seguro que hace diez años. Y así se debe seguir, tanto en el Camino Francés como en todos los demás caminos. No hay estadísticas oficiales al respecto, pero las dos principales causas de muerte en el camino son, y con mucha diferencia, el infarto y el atropello. Luego hay otras causas más raras, como el ictus, el golpe de calor y las heridas por caída. En fin, lamentar el terrible accidente, ahora ya será la Justicia quien dirimirá responsabilidades, y nosotros los peregrinos debemos mantener alta la atención al cruzar o caminar por una carretera, y no dar nunca la espalda al carril de circulación más próximo. Y llevar un chaleco reflectante si caminamos de noche.