De Santiago a Muxía y Fisterra, invierno de 2013
He escrito un libro al respecto que publicaré en Amazon kdp -Kindle Direct Publishing- en el mes de enero. Lo titulo Viaje al Fin de la Tierra, autor Cerinto.
En él relato al pormenor mi experiencia, muy agradable por cierto, y que cuento repetir a la primera ocasión.
No me ha parecido duro, en contra de lo que algunos dicen, pero debo aclarar que estoy acostumbrado a caminar desde hace ya muchos años y le echo cara a lo que se me ofrezca.
Ay, las señales. A la salida de Muxía se corre el riesgo de equivocarse, pues las señales son un poco confusas. En Xurarantes me perdí, pero volví atrás y vi una señal que había pasado por alto a la ida. Fue despiste mío antes que fallo ajeno.
Oh, en cuanto a los albergues, ningún problema. Hay que tener en cuenta sin embargo que yo hago bien 20 km diarios. Además, como en Lires, abunda el hospedaje privado, al que se puede recurrir en caso de necesidad.
Me ha sorprendido agradablemente el llamado Aurora de los Caminos, en san Martiño de Ozón. Me quedé a pasar en él una noche. Lo recomiendo. Es diferente a los otros.
Ninguna. Ánimo, amigos. La experiencia del Camino bien vale la pena. O quizá daría una. Las quejas que he oído se refirieron todas al calzado. La experiencia depende mucho del bienestar de los pies; y él depende mucho del calzado. Todo el tiempo perdido en elegirlo bien, es tiempo bien aprovechado.