El Camino Francés de Saint Jean Pied de Port a Santiago, 2013
La experiencia es única. Me cambió la forma de encarar la vida. Borró parte de mis miedos. Me dió confianza en mi misma.
Fue duro el primer día cruzando los Pirineos hasta Roncesvalles, la etapa de Pamplona a Puente la Reina, de Foncebadón a Ponferrada y de Villafranca del Bierzo a O Cebreiro, aunque justamente estas etapas son las más bellas.
No me perdí en todo el camino, aunque alguna vez faltó un poquito de ayuda que se reemplazó por intuición.
Algunos fueron fatales en cuanto a limpieza (Villafranca del Bierzo, Foncebadón, Estella), pero la mayoría fueron muy buenos, y sobre todo destaco la amabilidad de los hospitaleros en general.
Llevar lo mínimo indispensable (e invertir en buen calzado y capa de lluvia), todo lo necesario se consigue en el camino. Sacar muchas fotos y anotar las anécdotas, con el tiempo la memoria borra muchos detalles.