Etapa 2M: O Cruceiro de Roo - Noia | Recorrido

Distancia: 
18,4 km
Duración: 
4 h 30 min
Dificultad: 
2
Paisaje: 
3

0,0

1,6 km

Desde el cruceiro continuamos por la carretera AC-550, y al llegar a una curva al frente, junto a la escuela, por una pista asfaltada que pasa tras el hostal Montreal. El camino se encuentra escoltado por grandes robles, castaños y pinos. Una vaguada conduce hasta la aldea de Brión de Arriba.

1,6

0,7 km

Entre las casas de la aldea desembocamos en un camino, pronto con firme de tierra. Discurre por un hermoso bosquete, a la orilla del arroyo de Brión, que forma una pequeña cascada. Entre prados ascendemos a la aldea de Cambeiro de Abaixo.

2,3

1,2 km

Superado el núcleo, el Camino coincide con la Ruta Das Fervenzas de San Paio e Gliptogrifos da Carballa, que a través de un pinar desciende a Serra de Outes.

Alcanzamos la DP-6202, que coincide con la Av. de San Pedro. En A Serra de Outes llegamos a una encrucijada con una farmacia desde la que tenemos dos opciones: seguir hasta el centro y tomar allí la variante del río Entíns (no señalizado), o girar a la izquierda por el itinerario oficial.

3,5

3,0 km

El Camino no pasa por el centro, sino que rodea la localidad por la DP-3404, que se prolonga ante el instituto dedicado al poeta Francisco Añón. Se cruza el río de Outes y tras el pazo de Boel nos separamos de la carretera por la izquierda para atravesar la aldea de Boel, con cruceiro y emparrados.

Al volver a la carretera la cruzamos para bajar al valle del río Entíns, un vergel ocupado con cultivos y arbolado. Por la derecha viene la variante del paseo fluvial.

Convertido en pista forestal, el Camino prosigue al frente por un encantador bosque autóctono de robles, castaños y laureles hasta la ponte do Ruso. De arco único, aunque alomado y de aspecto medieval, el puente data de 1746 y formaba parte del Camino Real.

Tras cruzarlo vamos a describir forzados ángulos rectos en una zona de concentración parcelaria. Después de cruzar la DP-4502, giramos a la izquierda para pasar por la aldea de Brenzo.

Desde Brenzo no hay más que seguir la pista local que se dirige hacia la torre de la iglesia de San Ourente, desembocando en la DP-5604 (a 100 m del Camino hay un bar), para aproximarse a ella y acceder a su atrio elevado.

6,5

5,0 km

Desde el atrio, junto al cementerio parroquial bajamos hasta la vecina capilla de Santa María do Rial, con cruceiro, fuente santa y arbolado.

Completando un rodeo por el valle del Entíns, pasamos por la aldea de Lavacolla, como la compostelana del Camino Francés donde está el aeropuerto. Tras ella principia un antiguo camino encajado (congostra), entre muretes de piedra, que cuesta arriba conduce a un solitario cruceiro en medio del bosque.

Estamos en el monte do Cristo, y por un camino que enseguida se convierte en pista forestal vamos dos veces a la derecha para recorrer un largo tramo; lo haremos por un área forestal poblada de pinos y eucaliptos.

Avanzamos por los montes da Raña y do Toxo, divisando a la izquierda el valle del río Donas, con las aldeas de Cuns y Cando.

Una larga bajada nos deja en Vilardigo, desde donde contemplamos el plácido estuario del Tambre, el principal río que desagua en la ría de Muros y Noia. Antes de llegar a Ponte Nafonso, es preciso desviarse a la izquierda para pasar por A Toxeira, donde una senda nos deja en la AC-196.

11,5

0,5 km

Por la AC-196 llegamos al Ponte Nafonso, con la capilla de Nosa Señora da Ponte en esta orilla. 

Cruzamos sin prisa el río Tambre por el largo puente, reparado en 2022 con nueva calzada y pretiles. Se convierte en un privilegiado mirador sobre el espacio natural y las aves que en él habitan. En la parte opuesta se prolonga el caserío de A Ponte Nafonso, con muchas casas antiguas, un lavadero cubierto y un cruceiro.

12,0

3,2 km

A la salida de la aldea dejamos la carretera AC-196 para subir a la izquierda, por la DP-5701, hasta las casas de O Campo da Costa. En la encrucijada presidida por un cruceiro dejamos por fin a mano derecha la carretera para tomar un camino que se introduce en un bosque mixto. Entre los árboles se va divisando un brazo de la ría.

Regresamos un instante a la AC-196 cruzando el regato das Cunchas, en el que hay varios molinos tradicionales, y regresamos al bosque para recorrer otros 500 m por él. Tan agradable tramo concluye en la agobiante rotonda viaria de Orro, en la que convergen varias carreteras, entre ellas la que cruza el puente grande de la ría.

Para evitar la peligrosa rotonda, se propone retroceder 20 m por la carretera hasta encontrar la vía de servicio que pasa bajo la AC-550 y tres viaductos del acceso al puente, volviendo a subir a la AC-550 en O Sacido, desde donde ya hay aceras. Por la izquierda nos introducimos en la aldea de Orro, presidida por un nuevo cruceiro.

15,2

1,5 km

De vuelta a la AC-550, continuamos un tramo de 150 m por ella hasta encontrar el desvío a Eiroa. De este modo atravesamos esta aldea, regresando poco después a la general no lejos de su notable cruceiro.

Cruzamos una vez más la AC-550, prosiguiendo la marcha por un rosario de aldeas engarzadas: primero Vilanova, luego O Telleiro, y por fin por A Igrexa, donde transitamos entre los templos viejo (medieval, ahora capilla de San Antón, en un tétrico cementerio) y nuevo (barroco, con acceso por escalinata) de Santa Cristina de Barro.

16,7

1,7 km

Ya falta poco para alcanzar Noia. Lo haremos pasando por A Devesa (cruceiro y lavadero), A Loxe y, a través de la Rúa da Calzada, topónimo viario, accediendo al bullicioso centro de la villa.

Paseamos longitudinalmente la alameda, con sus palmeras, y los mimados jardines Felipe de Castro, poblados de esculturas. Cruzando la Rúa Ferrador entraremos al antiguo casco murado por las rúas Montero Ríos y do Cantón, que nos deja ante la iglesia de San Martiño, cuya fachada mira a la Praza do Tapal.

18,4